Que el atún de almadraba es una pieza cotizada en todo el mundo no es nada nuevo. Ya lo fue en época romana, gracias a las exportaciones de productos como el garum, una salsa mezcla de la sangre del túnido, con restos de otros peces y especias. Por eso no es de extrañar que gentes de todo el mundo vengan a desgustar tan sabroso manjar a nuestra tierra.
Esto no es óbice para que deje de resultar curioso y, sobretodo, un orgullo para un municipio que en buena parte vive de este ejemplar marino.
Así, el último celebrity que ha tenido el privilegio de paladear ricos platos con la materia prima barbateña ha sido el jugador de la NBA LeBron James. El americano, que está de vaciones por Europa, estuvo este fin de semana en Jerez en las Bodegas Díez-Mérito.
Allí, según cuenta su gerente a El Mundo, pudo degustar los caldos de la zona y comer atún de almadraba. “Alucinó con el atún de Barbate, el jamón ibérico Joselito, el gazpacho y las tortillitas de camarones”, según comentan desde el establecimiento.
Que la estrella de Los Lakers tenga un paladar tan exquisito no deja de ser una anécdota, lo verdaderamente curioso es que el nombre de la localidad barbateña se coloque, por derecho propio, en el horizonte de personas con tan relevacia y tirón mediático.
Al parecer, LeBron es un experto en vinos y por eso quiso hacer una parada en tierras jerezanas. Suponemos, aunque es un dato sin confirmar, que para el postre el jugador de baloncesto internacional se pegaría una de Canasta.